El tipo de apego que desarrollamos en la infancia con nuestros cuidadores primarios influye de manera significativa en la forma que tenemos de vincularnos afectivamente. La ausencia o marcha de la figura de apego genera malestar y angustia, disminuyendo su actividad y manifestando preocupación, y su vuelta es siempre https://tarotdejesus53197.blog2freedom.com/33033316/5-simple-techniques-for-amor-y-recuerdos